El Especialista en farmacia hospitalaria Francesc Puigventós, el Colegio Oficial de Médicos de Toledo, la Confederación Salud Mental España, la periodista Sara Plaza Casares y la organización internacional Salud y Fármacos han sido reconocidos por la Asociación por un Acceso Justo al Medicamento (AAJM) en la III edición de sus Premios AAJM.
El jurado de los III Premios AAJM, formado por toda la junta directiva de la asociación que preside la Dra. Soledad Cabezón, ha otorgado un reconocimiento especial al escritor y director de cine Roberto Santiago, por su labor de difusión de las prácticas y abusos de la industria farmacéutica.
Las trabas al acceso a los medicamentos, algo que la AAJM considera una agresión a un derecho básico como es el de la salud, y en definitiva a la vida, son multicausales, pero derivadas de la codicia sin límites de las grandes empresas farmacéuticas, que, para dotar a sus accionistas de cuantiosos beneficios, anteponen lo mercantil a lo ético, y, no dudan en el presionar a gobiernos y organizaciones supranacionales con actuaciones opacas al control de las finanzas públicas, retuercen el derecho a la propiedad intelectual amañando patentes en racimos a las que aplican precios abusivos y, entre otras maniobras, inventan enfermedades para atribuirles medicamentos, o ocultan la ineficacia de algunos fármacos con tal de no reducir sus volumen de ventas. Todas estas aristas están tratadas en el presente número.
Bajo el titular de portada “Flaquezas del tratado de Pandemias de la OMS”, este número 39, recoge distintas valoraciones que el acuerdo alcanzado en la sede de Ginebra de la OMS, el pasado 20 de mayo, ha despertado. Se pone el acento en la reacción de la Junta Directiva de la AAJM, que destaca cómo, en contra de los intereses universales de la población mundial, los derechos de propiedad intelectual, patentes, secretos comerciales y demás maniobras de las grandes farmacéuticas, después de más de tres años de debate, ha ahogado la justicia, la equidad y la opción de sacar millones de vidas si se produce una nueva pandemia.
Jaume Vidal, en el editorial, explica que la aprobación era un apoyo político imprescindible a la OMS, tras la retirada de los EEUU de la Organización y del apoyo de financiación que había prestado desde su constitución. Una opción que puede resultar comprensible pero que no convence a otros analistas de gran prestigio. Germán Velásquez, antiguo director del programa de medicamentos de la OMS, es tajante. Dice, “es la consagración de la injusticia como norma escrita” y subraya la insuficiencia de un texto que reserva únicamente el 10% de la producción global de vacunas, medicamentos y herramientas médicas para los países en desarrollo en caso de futuras pandemias. “Es la legitimación explícita de la desigualdad”, concluye. Por otra parte, el Equipo de Vigilancia de la OMS articulado por People’s Health Dispatch, va más allá de destacar la insuficiencia política y económica del Tratado, y denuncia todas las trampas tecnocráticas, hasta llegar a poner el dedo en la llaga y destacar, en la más rabiosa actualidad, el genocidio en Gaza y la politización de la salud. Desde una perspectiva más técnica, Mark Eccleston-Turnet y otros, en Think Global Health, valoran los principales problemas del Acuerdo Pandémico y, entre otros, destacan que no está garantizado ni el intercambio de datos sobre patógenos, ni el suministro y distribución de productos farmacéuticas.
Entre los demás originales, hay un excelente análisis del farmacéutico hospitalario Emilio Alegre, en el que desgrana la historia profunda de la evaluación de los nuevos medicamentos en España, y reclama “trabajo y crítica” para desmantelar el tinglado montado por la industria a su favor, con el beneplácito de las Administraciones. Se cuenta, asimismo, con la autopresentación de “Salud y Fármacos”, una organización decana y muy rigurosa en el fomento del uso y acceso adecuado a los medicamentos, que trabaja fundamentalmente en el ámbito hispano parlante americano.
En otras fuentes, el Nº 39 de la rAJM, además de los trabajos ya comentados al principio sobre el Tratado de Pandemias, se cuenta con el trabajo de Marta Iraola Iribarren & Grégoire Lory, en Euronews, en el que nos indican como varias organizaciones pro-transparencia celebran la sentencia del TSJE, que obliga a la presidenta de la Comisión de la UE, Ursula Von Der Layen, y al CEO de Pfizer, Albert Bourla, a revelar sus mensajes en la negociación de la financiación y compra de vacunas contra la COVID. También con el artículo de Ellen’t Hoen, en Medicines Lawe &Policy, en el que relata, la demanda de la Fundación de Responsabilidad Farmacéutica (PAF), sobre las descomunales ganancias de Abbvie con el medicamento Humira obtenidas en los Países Bajos. Finalmente, se hace eco de la investigación “Asistencia sanitaria y lobby farmacéutico”, de Carlos Fernández Oropesa, publicada en la Revista Española de Comunicación en Salud, donde explora las complejas relaciones entre la industria farmacéutica, a través de sus grupos de presión y la atención primaria. Describe los mecanismos utilizados por la BigPharma para conseguir sus objetivos de precios elevados, prolongación de patentes, etc. Como posible respuesta a la estrategia utilizada por las empresas farmacéuticas, propone una Atención Primaria centrada en el paciente con un enfoque clínico basado en la evidencia.
Este número 38 recoge las alegaciones completas presentadas por AAJM al anteproyecto de Ley de Medicamentos. Desde la Asociación se considera que los medicamentos y los productos sanitarios deben obedecer a la consideración de bienes sociales de utilidad pública y, en ese sentido, deben tener una prelación absoluta. Algunos de las mejoras propuestas al anteproyecto son reducir los copagos hasta eliminarlos, impulsar la fabricación pública de medicamentos, así como la opción a su distribución directa desde los centros de salud. Esta publicación, en relación con el citado anteproyecto, aporta asimismo el editorial, de Patricia Lacruz Gimeno, miembro de la Comisión Editorial, que considera que el anteproyecto “responde a una estrategia dirigida por la industria farmacéutica”; un análisis del texto de Ángel Mª Martín Fernández-Gallardo, vicepresidente de la AAJM y exjefe del Área de Farmacia del SESCAM, que estima que los fabricantes de medicamentos “confunden o engañan a la sociedad con un descaro que sólo es posible por la seguridad que tienen de controlar perfectamente el discurso y de que los medios afines retransmiten y amplifican sin la más mínima crítica, verificación ni contraste”; y otro articulo más, referido al mismo asunto, de Fernando Magro, ex-director general del INSALUD, que concluye indicando que “queda camino por recorrer en estos momentos claves que deben dirigirse a una mayor unidad europea que no sea meramente formal, sino real y ejecutiva, política, económica y cultural, para que el medicamento también sea un elemento de referencia, de uso, de consumo de accesibilidad igual para todos”.
Entre los originales, hay, igualmente, una valoración de Fernando Lamata, psiquiatra y presidente de la Comisión Editorial, sobre el Plan de Acción de Salud Mental 2025-2027, que fue aprobado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el pasado 4 de abril, del que señala que “las líneas estratégicas que recogen los diferentes objetivos son muy acertadas. Nos dicen lo que hay que hacer. Sin embargo, las acciones que se definen para lograr dichos objetivos se quedan muy cortas”.
En otras fuentes, el Nº 38de la rAJM, se detalla una hipótesis formulada por Dean Baker, de CEPR, que viene a indicar que la política de aranceles de Trump, puede suponer que le salga el tiro por la culata, dada su transgresión del libre comercio, y que el resto de países no respeten los monopolios estadounidenses de patentes y derechos de autor, con lo que alcanzarían ahorros muy sustanciales. También este número se hace eco de un interesante, descriptivo y claro artículo de Salud por Derecho donde, entre otros temas, se abordan algunas de las propuestas relacionadas con el Tratado de Pandemias de la Organización Mundial de la Salud, relacionadas con la transferencia de tecnología y el sistema de acceso y reparto de beneficios. Finalmente, desde otras fuentes, se aporta un análisis de Sara Plaza Casares, de El Salto, sobre el anteproyecto de Ley de Medicamentos, en el que recogen varias opiniones destacadas y, entre ellas, las del vicepresidente de la AAJM, Ángel Mª Martín, que subraya que “necesitamos un sistema que produzca una bajada real de los genéricos y no una bajada estética. Además, que no se cargue la imagen de los genéricos, que tanto ha costado reforzar. Si el Ministerio da distintos precios a unos y a otros, ¿quién se va a creer que es lo mismo?”
La filósofa y miembro de la Comisión Editorial de la revista, María Julia Bertomeu, desde Argentina, en el editorial El gran estafador, su padrino político y el acceso a los medicamentos, desgrana el tsunami neoliberal de Trump y sus satélites (que ella conoce bien), y las consecuencias que ello comporta para la salud global y sus reflejo en cada sujeto.
Entre los restantes originales, todos ellos incidiendo en preocupantes desequilibrios sociales y científicos de la situación actual, contamos con un trabajo Ana Isabel Rigueira García, farmacéutica especialista en Farmacia Hospitalaria del SESPA, que pone en dedo en la llaga sobre los problemas que acarrea la no financiación de los laxantes, sobre todo en el caso de los mayores dependientes institucionalizados; por otra parte, José Manuel Estrada y Serapio Severiano, de la Comisión de Redacción de la revista, nos ofrecen una análisis detallado de las revistas y/o editoriales científicas depredadoras, que nos están inundando con miles de artículos de dudosa calidad y nulo rigor científico para aumentar su cuenta de beneficios
En otras fuentes, el Nº 36 de la rAJM, recoge la denuncia que hacen en Jacobine, Jeanne Lenzer y Shannon Brownlee, sobre la grandes farmacéuticas que están promocionando medicamentos potencialmente mortales contra el Alzheimer, artículo que forma parte de una investigación sobre el proceso de aprobación de medicamentos de la Administración de Alimentos y Medicamentos (en los EE.UU.) y lo que significa para la seguridad y la salud pública. Cuenta con el apoyo de Lever y el McGraw Center for Business Journalism de la Escuela de Periodismo CUNY.
Asimismo, se hace eco de la información elaborada por Salud por Derecho, sobre acceso, y transparencia e influencia de la industria, en torno a los desafíos de la resolución de enfermedades raras de la OMS.
Igualmente, tiene un notable interés el artículo suscrito por Mika O’Salminen, Otto Helve, Henrik Ostermann, Claudia Habl, Guri Røtveiy y otros, en The Lancet, donde señalan que la necesidad urgente de proteger a la OMS también es una oportunidad, y puntualizan que “hay mucho en juego: el futuro de la salud mundial depende de la capacidad de la OMS para continuar su trabajo crucial para la salud pública mundial”.
Finalmente, se da entrada a una reflexión del Premio Nobel Paul Krugman que, aunque no aborda directamente problemas relacionados con el acceso a los medicamentos, y se limita a los EE.UU. aporta reflexiones relevantes, desde las circunstancias (sanitarias) de la construcción del Canal de Panamá, al cierre, por parte del secretario de Sanidad Robert F. Kennedy Jr., un “chiflado” según lo califica, que ha ordenado que los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades dejen de publicar datos, con lo que es probable que “todo esto conduzca a muchas muertes evitables: cientos de miles, tal vez millones”.
Los costes de producción y de investigación y desarrollo tecnológico deben de ser el criterio principal para la fijación de precios de los medicamentos para que su coste sea calculado en función de su coste real, de manera objetiva y transparente.
Así lo considera la Asociación por un Acceso Justo al Medicamento (AAJM) en sus propuestas enviadas hoy al Ministerio de Sanidad para el proyecto de Real Decreto por el que se regulan los procedimientos de financiación y precio de los medicamentos, cuya consulta pública finaliza hoy, 15 de enero.
Este numero, correspondiente a los meses de noviembre y diciembre de 2024, arranca deseando a todos un feliz cambio anual de ciclo y expresando de deseo de conseguir el derecho efectivo e universal a la salud.
El editorial, de Fernando Lamata, presidente de la Comisión Editorial de la rAJM, analiza la negociación de Tratado de Pandemias, promovido por la OMS, en el que aprecia la pugna entre codicia y equidad y subraya la necesidad de “presionar desde el otro lado. Desde la conciencia colectiva del conjunto de la sociedad y de los pueblos. Frente a los cien mil millonarios, estamos todos los demás, la sociedad de la gente de a pie, el movimiento ciudadano en sus diversas formas”.
Entre los originales, por ser un tema eminentemente propio, destaca el acto de entrega de los premios AAJM 2024, que se celebró el 23 de noviembre con la excelente hospitalidad del Ayuntamiento de Noblejas. Joan Ramon Laporte, Mercedes Zurita, AVITE, Oriol Güell y NoGracias, fueron los galardonados y Manuel Rico (Investigate Europe), tuvo un reconocimiento especial. Se recogen los méritos de cada uno y las declaraciones de los mismos enlazadas a vídeos en YouTube. Asimismo, Soledad Cabezón, presidenta de la AAJM, aprovechó la ocasión para hacer un discurso muy didáctico en el que desmenuzó como la actual política farmacéutica mata y atenta contra el Derecho Humano a la salud.
Entre los restantes originales, igualmente oportunos y adaptados al análisis crítico de la situación actual, se cuenta con el trabajo de Félix Bermejo Pareja y María Victoria Zunzunegui, profesor emérito de CIBERNED el primero y epidemióloga la segunda, revisan las terapias en la enfermedad de Alzheimer y la aprobación de lecanemad y concluyen indicando que “los datos recientes indican una disminución del riesgo de demencia del anciano (y EA) apoyan la necesidad de una estrategia de prevención durante toda la trayectoria vital mediante una acción holística, médica y social y opuesta a la aprobación y acceso universal a tratamientos farmacológicos de dudosa eficacia y seguridad”. El siguiente original de Antonio Pujol de Castro, médico residente de Medicina Preventiva y Salud Publica, vocal de la Comisión Nacional de la Especialidad, de la Red Europea de Residentes de Salud Pública y de la AAJM, abre un debate con el artículo sobre vacunas publicado en el anterior número de la revista por Juan Gervás y Mercedes Pérez-Fernández. Desde el punto de vista de Pujol hay que denunciar los precios abusivos y “no perder en nuestro discurso el abogar por sistemas productivos públicos que suministren y den respuesta a las necesidades reales de la población y por prestaciones sociales suficientes”
En otras fuentes, el Nº 34 de la rAJM, recoge la conferencia de Fernando Lamata sobre aspectos éticos de la investigación celebrada en el Instituto de Salud Carlos III; el preciso análisis cuantitativo de Juan Simó sobre el gasto público en farmacia hospitalaria, que se ha multiplicado por 10 en 28 años; la valoración de Make Medicinas Affordable a partir del anuncio de Gilead sobre su licencia voluntaria para lenacapavir, que les lleva señalar que “el mundo no puede confiar en las empresas farmacéuticas para garantizar el acceso a los medicamentos esenciales”, y, finalmente, la reflexión de Dean Baker, en la que desarrolla su idea de financiación pública directa de la investigación, para de esta manera conseguir la reducción total de los precios abusivos generados por el sistema actual de investigación de nuevos fármacos de las farmacéuticas basado en las patentes y el monopolio.
El catedrático de Farmacología Joan Ramon Laporte, la Dra. Mercedes Zurita (Hospital Universitario Puerta de Hierro), la Asociación de Víctimas de la Talidomida en España (AVITE), el periodista Oriol Güell (El País), la Organización Civil Internacional NoGracias y el periodista Manuel Rico, de la coalición europea Investigate Europe, recibieron hoy los Premios de la Asociación por un Acceso Justo al Medicamento (AAJM).
El acto, que se celebró en el Ayuntamiento de Noblejas (Toledo), presidido por su alcalde, Agustín Jiménez Crespo, y la presidenta de la AAJM, Soledad Cabezón. Durante el mismo, se expresaron numerosas muestras de apoyo a las víctimas de la DANA, tanto de la comunidad autónoma de Valencia como de Castilla-La Mancha. Intervinieron también el Juan José Rodríguez Sandín, médico de Noblejas y ex presidente de la AAJM. El presidente de la Organización Médica Colegial. Tomás Cobo, envió un video de aliento a la labor de la AAJM.
El catedrático de Farmacología Joan Ramon Laporte, la Dra. Mercedes Zurita (Hospital Universitario Puerta de Hierro), la Asociación de Víctimas de la Talidomida en España (AVITE), el periodista Oriol Güell (El País), la Organización Civil Internacional NoGracias y el periodista Manuel Rico, de la coalición europea Investigate Europe, recibirán el próximo 23 de noviembre los Premios de la Asociación por un Acceso Justo al Medicamento (AAJM). Esta II edición de los Premios AAJM 2024 se entregarán, como en la anterior edición, en el Ayuntamiento de Noblejas (Toledo), en un acto presidido por su alcalde, Agustín Jiménez Crespo; la presidenta de la AAJM, Soledad Cabezón, y la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Mercedes Tolón Jaime.